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Santiago: Miércoles 29 de enero del 2025 | Actualizado 19:47
CABO CAÑAVERAL.- Dos astronautas de la Estación Espacial Internacional debieron suspender el sábado una salida para reacondicionar sus organismos en una cámara de baja presión, luego de que una falsa alarma de despresurización apagó el sistema de ventilación de la instalación.
El problema, que interrumpió el sueño de los tripulantes de la Estación Espacial Internacional y del transbordador estadounidense Atlantis por segunda noche consecutiva, tendría su origen en un nuevo módulo de acoplamiento ruso que llegó al lugar el 12 de noviembre.
Los tripulantes del Atlantis, Michael Foreman y Randy Bresnik, dormían dentro de las esclusas de aire de la estación cuando las alarmas comenzaron a sonar indicando que el lugar se estaba despresurizando.
Los controladores de vuelo rápidamente se dieron cuenta de que se trataba de una falsa alarma, pero el sistema apagó automáticamente los ventiladores, lo que a su vez hizo que el polvo acumulado comenzara a circular en un ambiente de microgravedad, encendiendo los detectores de humo.
A la tripulación le llevó una hora lograr que los ventiladores volvieran a funcionar, haciendo que la NASA cancelara la salida de los astronautas, que apuntaba a purgar la presencia de nitrógeno de sus cuerpos para evitar una enfermedad conocida como "aeroembolismo".
En cambio, Foreman y Bresnik respirarán oxígeno puro y harán ejercicio en bicicletas fijas para sacar el nitrógeno de sus cuerpos, antes de flotar fuera de la estación para comenzar una caminata espacial de seis horas.
La caminata, la segunda de las tres planeadas durante la semana que la tripulación del Atlantis pasará en la estación, comenzará a las 14.45 GMT, una hora más tarde que lo planeado.
El Atlantis llegó a la estación el miércoles para entregar unos repuestos necesarios para mantener operativa la instalación antes del retiro del programa de transbordadores el próximo año.
Durante su caminata del sábado, Foreman y Bresnik instalarán antenas de comunicación.
Bresnik, en su primer viaje al espacio, seguía esperando noticias sobre el nacimiento de su segundo hijo. Estaba previsto que su esposa diera a luz a un niño el viernes.
