MANILA.- Miembros de la policía y del Ejército estuvieron involucrados en la masacre que el pasado lunes segó la vida de 57 personas en el sur de Filipinas, informó hoy la minisra de Justicia del país, Agnes Devenadera.
Según la titular de Justicia, los testimonios de los testigos muestran que muchos oficiales de policía, soldados y milicianos del gobierno estuvieron involucardos en la matanza ocurrida el lunes en la ciudad de Amptua, 930 kilómetros al sur de Manila.
"Según los testimonios que hemos recogido no sólo cuatro (policías) estuvieron involucrados, sino también muchos soldados y milicanos del gobierno", dijo Devenadera en una emisora de radio.
La ministra aseguró que más de 20 testigos, tres de ellos participantes en el ataque, relacionaron al principal sospechoso, Datu Andal Ampatuan Junior, con el crimen.
La ministra aseguró que hay "testigos que estuvieron en el lugar cuando las víctimas fueron disparadas" y apuntó que hay fuertes indicios de que la masacre fue planeada.
Cuatro policías están detenidos mientras prosiguen las investigaciones y dos oficiales de alto rango también están siendo investigados.
El principal sospechoso, Datu Andal, se encuentra en prisión preventiva desde el jueves y los fiscales podrían iniciar una causa contra él por múltiple asesinato. Además también están detenidos ocho familiares de Andal, entre ellos su padre y gobernador de Maguindanao, Andal Amapatual Senir, patriarca del clan político de los Amapatuan, que domina la región desde hace décadas.
Andal junior es sospechoso de haber asaltado el lunes con 100 hombres armados el convoy de familiares de su rival político. El grupo, perteneciente al clan de los Mangadadatu, se disponía a presentar la candidatura de Esmael Mangadadatu para las elecciones a gobernador en mayo.
Andal aspira a suceder a su padre como gobernador, por lo que su familia presuntamente advirtió bajo amenazas de muerte a los Mangadadatu contra su participación en las elecciones de mayo.
Los miembros del convoy fueron secuestrados y 57 de ellos fueron decapitados o tiroteados. La ministra de Justicia aseguró el viernes que existen indicios de que las víctimas femeninas, entre ellas la esposa del candidato y dos de sus hermanas, fueron violadas antes de ser asesinadas.
El viernes el principal sospechoso defendió su inocencia y acusó del crimen al Frente Moro de Liberación Islámica (MILF), que desde hace años lucha por la independencia en el sur de Filipinas. Un portavoz del MILF rechazó sin embargo las acusacioens.
El próximo mes de mayo el pueblo filipino celebrará elecciones presidenciales, parlamentarias y locales. El senador Benigno Aquino III, hijo de la mítica presidenta Corazón Aquino, presentó hoy su candidatura para los comicios presidenciales del próximo año.