CIUDAD DEL VATICANO.- El Presidente de Perú, Alan García, confirmó que en su reunión con Benedicto XVI en el Vaticano, presentó al Papa su programa de desarme para América Latina frente a los temores de una carrera armamentista en el continente.
"Le he expuesto nuestra teoría de lograr mediante el límite de compras de armas asegurar una unión sudamericana sin desconfianzas, sin conflictos y que asegure más recursos para la pobreza", explicó el Mandatario peruano al término del encuentro en el Vaticano.
García también presentará su iniciativa en la XIX Cumbre Iberoamericana que se desarrolla en Portugal.
El portavoz vaticano, Federico Lombardi, precisó que la audiencia se desarrolló en un ambiente de "cordialidad" y el coloquio permitió "un intercambio fructuoso de opiniones sobre asuntos referentes a la actual situación internacional, especialmente en la región".
"También se ha hablado de algunos aspectos de la situación en Perú, en particular del compromiso del gobierno para erradicar la pobreza, de la promoción del estado de derecho, la salvaguardia del ambiente, así como los ámbitos de colaboración entre la Iglesia y el Estado", señaló Lombardi.
García no abordó con el Pontífice el tema de la demanda marítima peruana contra Chile en la Corte de La Haya.
Pormenores de la visita
El Presidente peruano llegó al Vaticano a las 10:45 horas locales (09:45 horas GMT). Tras ser recibido por el prefecto de la Casa Pontificia, el arzobispo James Harvey, éste le acompañó, junto a los Gentihombres del Papa (protocolo), hasta la Biblioteca Privada, en cuya puerta que da a la Sala del Tronetto lo esperaba Benedicto XVI.
"Bienvenido, Presidente", le dijo el Papa en español. García le dio las gracias, a la vez que le besó el anillo y se inclinó.
Alan García le dijo, siempre en español: "Santidad, han pasado ya más de 20 años de la última vez que nos vimos. Ese tiempo no es nada". Después, hablando con la prensa, el Mandatario contó que se entrevistó hace 22 años en Perú cuando el Papa era el cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe.
Una vez en la biblioteca, el Papa y García, sentados uno frente al otro, comenzaron el coloquio privado. Antes, el Presidente peruano resaltó lo bien que lo encontraba físicamente.
Después dijo a la prensa que quería dar testimonio ante el mundo de dos cosas: "Primero que su inteligencia está incólume, hábil y rápida, y comprensiva. Segundo, que su estado físico es maravilloso, perfecto y naturalmente, ojalá, lo veamos algún día por Suramérica y en Perú".
Concluido el coloquio a solas, entró en la Biblioteca el séquito presidencial, del que formaron parte los ministro de Exteriores, José Antonio García Belaúnde, y Defensa, Rafael Rey; el Secretario general de la Presidencia, Luis Navas; el dirigente político del Partido Aprista Carlos Roca; el embajador de Perú ante la Santa Sede, Alfonso Rivero, y el segundo consejero de la embajada, Luis Leyva.
Tras la reunión con el Papa, García se entrevistó con el cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado, que estuvo acompañado del arzobispo Dominique Mamberti, secretario para las Relaciones con los Estados ("ministro de Exteriores" del Vaticano).