GINEBRA.- Las Naciones Unidas pidieron este lunes a sus miembros más ricos que destinen un total de 7.100 millones de dólares durante el 2010 para financiar programas urgentes de asistencia humanitaria para 48 millones de personas en 25 países.
Esta es la suma más grande para este tipo de ayuda desde que el organismo internacional comenzó a hacer pedidos para financiar las luchas contra crisis en distintas partes del mundo en 1991.
"Nuestra meta es ayudar a que estas personas sobrevivan durante el próximo año, y comenzar a definir un camino para sacarlos de la vulnerabilidad y llevarlos a una vida más digna, más segura y autosuficiente a la que todo ser humano tiene derecho", dijo el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon.
Los comentarios del funcionario, en un adelanto del texto del pedido emitido en Ginebra, fueron completados por el llamado de su principal coordinador de ayuda humanitaria, John Holmes, quien pidió a los países ricos que no redujeran su ayuda debido a la crisis económica.
Los fondos recaudados durante el proceso son compartidos por unas 380 organizaciones de ayuda, que incluyen agencias de la ONU, organizaciones no gubernamentales y otros organismos internacionales que trabajan en el campo humanitario.
Todas estas entidades han trabajado de manera conjunta para elaborar el pedido y detallar las necesidades de los países y regiones a los que apuntan, que son: Afganistán, la República Democrática del Congo, Kenia, los territorios palestinos ocupados, Somalia, Sudán y Yemen.
"Estamos acá para pedir una respuesta al llamado urgente de estas personas cuyas vidas han sido afectadas por conflictos y desastres naturales", dijo Holmes, secretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios.
El funcionario señaló que muchos Gobiernos estaban centrados en planes de rescate financiero y paquetes de estímulo económico, poniendo presión en sus presupuestos.
"Mi mensaje más importante para ustedes es que la ayuda humanitaria debe ser aislada de esas presiones presupuestarias", declaró.
Si la asistencia financiera para las crisis humanitarias se reduce, añadió, "las personas afectadas por los desastres naturales y conflictos pagarán el precio de una recesión que no ocasionaron".