LIMA.- El tren eléctrico para el transporte urbano de Lima, que empezó a construirse hace 23 años pero del que hasta ahora sólo hay algunas estaciones y columnas abandonadas, podría ser una realidad dentro de 18 meses, después de que se le encargara la obra a un consorcio brasileño-peruano.
El ministro de Transportes, Enrique Cornejo, anunció que la mejor oferta presentada entre tres postulantes fue la de consorcio Tren Eléctrico, formado por la constructora brasileña Norberto Odebrecht y la peruana Graña y Montero.
Se estima que la obra requerirá de unos 410 millones de dólares, de los que 300 millones saldrán de un crédito de la Corporación Andina de Fomento.
El tren, que debe unir a los populosos distritos del sur de Lima con el centro de la ciudad, empezó a construirse durante el primer gobierno de Alan García, pero, después de algunos avances, quedó estancado durante décadas en medio de dudas sobre su viabilidad y de sospechosas no comprobadas sobre actos corruptos en su concepción.
Según los cálculos de los expertos, cuando la obra esté lista los pobladores del distrito sureño Villa El Salvador podrán llegar al centro de Lima en unos 20 minutos. Actualmente ese tramo les significa a las personas más de una hora en ómnibus.
Lima, ciudad de ocho millones de habitantes que carece de metro o cualquier otro medio de transporte masivo organizado, padece desde años atrás de una grave crisis en su tráfico automotor. La alcaldía metropolitana, paralelamente, trabaja en un sistema de ómnibus por vías exclusivas que debe estar listo el próximo año.