BRUSELAS.- La Policía encontró en un bosque de Charleroi (sur de Bélgica) el cuerpo de una niña francesa desaparecida hace seis meses y supuestamente fallecida a causa de malos tratos, informan hoy los medios belgas.
La pequeña, de 5 años, era buscada por las autoridades judiciales francesas desde el 19 de junio pasado, cuando su madre denunció su desaparición en la localidad de Maubeuge, muy cercana a la frontera con Bélgica.
La semana pasada, tras seis meses de investigación, la madre de la niña y su compañero sentimental confesaron a un tribunal francés que la pequeña había fallecido a causa de una ducha de agua fría que le dieron a modo de castigo.
El cuerpo de Typhanie Taton fue hallado ayer por la tarde en el bosque de Marcinelle, cerca de la ciudad valona de Charleroi, después de una búsqueda llevada a cabo por otras zonas del sur de Bélgica por la Policía de este país, en colaboración con las autoridades francesas.
El compañero de la madre, Nicolas Willot, quien junto a ella está inculpado en el caso, precisó el lugar en el que se encontraba enterrado el cadáver, publica hoy el diario belga "La Dernière Heure".
Aunque hay que esperar a que las pruebas de ADN confirmen la identidad, está "casi establecido" que se trata de Typhanie, según el mismo medio, que cita como fuente al Tribunal de Charleroi.
Las autoridades judiciales belgas serán las encargadas de llevar a cabo la autopsia durante el día de hoy y, a continuación, trasladarán el informe al tribunal francés a cargo del caso y repatriarán el cuerpo.
Según la versión de los hechos de la pareja, tras la muerte de la pequeña conservaron su cadáver en casa durante unos días, hasta que Willot lo llevó en su vehículo para enterrarlo a 90 kilómetros de su domicilio.
Typhanie vivía con su padre biológico, François Taton, desde la separación de éste y su madre, Anne-Sophie Faucheur.
En enero de 2008, Faucheur decidió llevarse a la niña a vivir con ella y con su pareja sin el consentimiento del padre, según "La Dernière Heure".