TEGUCIGALPA.- El Presidente electo de Honduras, Porfirio Lobo, señaló hoy que debe haber un "total desprendimiento" de los gobernantes de facto, Roberto Micheletti, y derrocado, Manuel Zelaya, para resolver la crisis política que el país vive por el golpe de Estado del 28 de junio pasado.
Lobo reafirmó que debe cumplirse totalmente el Acuerdo de Tegucigalpa-San José, firmado por Micheletti y Zelaya el 30 de octubre pasado, pero "también hay que cumplir la otra parte, que tiene que ver con lo que siempre se dijo, de un total desprendimiento de ambos sectores que estaban involucrados en este conflicto".
No precisó, sin embargo, en qué consiste ese "desprendimiento total", pero la semana pasada dijo que la comunidad internacional considera que Micheletti debe renunciar, como él mismo ha dicho en varias ocasiones, ahora que ya se descartó la restitución de Zelaya.
El pasado 2 de diciembre "el Congreso decidió, por ejemplo, lo que está en el acuerdo, la no restitución de don Manuel Zelaya; ya él, por decisión del Congreso, el día de hoy ya es el ex presidente de los hondureños, pero falta cumplir con lo demás", apuntó Lobo.
De cara a su Gobierno, que se instalará el 27 de enero próximo, dijo: "Mi deber es traerle paz a la nación, y para traerle paz a la nación yo necesito que esté Zelaya en paz, estar en paz con Zelaya, estar en paz con Micheletti", dijo Lobo a la radio HRN.
El político, del opositor Partido Nacional, consideró que "hay que hablar con Zelaya, hay que hacerle un tratamiento de él que sea digno", pues "tiene voluntad de un sector del pueblo hondureño, que también merece ser respetado".
Lobo y Zelaya iban a reunirse el jueves en República Dominicana, pero el gobierno de facto le negó el salvoconducto al derrocado Presidente, solicitado por México para viajar a ese país norteamericano, y un segundo intento, que sería hoy, fue postergado ayer por el Presidente dominicano, Leonel Fernández.
El gobierno de facto ha dicho que no se ha recibido ninguna nueva solicitud de salvoconducto para Zelaya desde el miércoles y que sólo se lo otorgará si viaja con "asilo político territorial" a un país que no sea de Centroamérica.
Lobo reiteró que está dispuesto, con garantías de seguridad, a visitar a Zelaya en la embajada de Brasil en Tegucigalpa, donde éste permanece desde el 21 de septiembre pasado.
Reafirmó que la comunidad internacional pide, para normalizar sus relaciones con Honduras, completar el cumplimiento del acuerdo de octubre con la integración de un Gobierno de reconciliación, la Comisión de la Verdad y la amnistía política, aunque ésta quedó excluida del documento.
A pesar de esa exclusión, advirtió, "si no hay amnistía política no hay fin a la conflictividad" y "cualquiera de los sectores involucrados en el conflicto pueden tener en el futuro problemas".
Lobo también reafirmó que la amnistía sólo sería por delitos políticos vinculados al golpe de Estado.
"No se refiere a delitos comunes, ésa es otra competencia y en eso, pues, cada quien debe responder por sus actuaciones", dijo.
Apuntó que en el caso de Zelaya "se habla de que hay temas judiciales, hay que revisar la realidad de esas situaciones, que ése es otro rollo aparte porque eso no se refiere a temas políticos".
Zelaya tiene órdenes de captura por delitos políticos y comunes cursados tras el golpe de Estado.