El general Samamé comparó al suboficial Víctor Ariza (en la foto) con Judas.
LIMA.- El nuevo jefe de la Fuerza Aérea de Perú (FAP), general Carlos Samamé, se comprometió a fortalecer la capacidad disuasiva de su institución y prometió castigo para el suboficial Víctor Ariza, acusado de haber espiado en favor de Chile y quien fue en el pasado su subordinado directo.
El fortalecimiento del poder disuasivo "será nuestra preocupación permanente y mi principal compromiso", dijo Samamé en el discurso de posesión. "Por ello brindaré mi mejor esfuerzo para que la Fuerza Aérea siga siendo grande y poderosa", añadió.
"Defenderé a cualquier precio el prestigio y buena imagen de la institución, que es patrimonio de todos los peruanos. No permitiré que caiga en el descrédito por la indolencia de algunos pocos", dijo el general en otro aparte.
En ese marco, aseveró que Ariza "se vendió por unas monedas como lo hizo Judas, entregando información clasificada a Chile". "Seré el primero en pedir que le caiga el máximo rigor de la Justicia ante tremenda traición".
Ariza, según su confesión, fue reclutado por la Inteligencia chilena en 2004, dos años después de que laborara en la agregaduría militar de la embajada peruana en Santiago, a cargo entonces de Samamé. El vínculo fue destacado por la prensa peruana y explica el deslinde del nuevo comandante el jefe de la FAP.
Samamé, que reemplaza al general Pedro Minaya, es el único jefe nuevo en los institutos militares peruanos para 2010, pues el general Otto Guivobich y el almirante Rolando Navarrete fueron ratificados en el Ejército y la Marina, respectivamente.
