LA HABANA.- El disidente cubano Guillermo Fariñas, en huelga de hambre y sed desde hace 28 días, "está muy mal" y puede sufrir "un shock séptico" a causa de una infección por estafilococo dorado, aseguró su madre, la enfermera Alicia Hernández.
"Mi hijo está al borde de una complicación mayor que pone en peligro su vida. Está muy mal y podría caer en un shock séptico. Eso es gravísimo, porque sus niveles inmunológicos están muy deteriorados", explicó Hernández, de 75 años.
La mujer, que no apoya la huelga ni la ideología de Fariñas, destacó que los médicos que lo atienden en la sala de cuidados intensivos del hospital de Santa Clara, "están luchando a brazo partido con él".
Hernández precisó que Fariñas "no está en estado de coma, pero sí muy decaído, con mucho dolor en las articulaciones y con fiebre de hasta 40,5 grados en las últimas 48 horas".
No obstante, indicó que "sigue consciente y mantiene su posición" de continuar la protesta que inició el 24 de febrero, en reclamo de la libertad de 26 presos políticos que presentarían un estado de salud delicado.
"Siento que nada va a lograr, pero él se mantiene", lamentó.
Fariñas, quien fue hospitalizado el 11 de marzo tras un shock hipoglucémico y comenzó a ser hidratado y alimentado por vía intravenosa -ahora suspendida por la infección-, se inspiró en el preso político Orlando Zapata, un albañil negro de 42, que murió el 23 de febrero después de dos meses y medio de huelga de hambre, por mejores condiciones carcelarias.
El gobierno cubano, que no reconoce la existencia de prisioneros políticos- unos 200, según la disidencia-, ha calificado de "chantaje" la huelga de Fariñas, a quien acusa de ser "un agente de Estados Unidos" y ha dejado claro que una eventual muerte es de su "entera responsabilidad".