KABUL.- Una encuesta elaborada por "Integrity Watch Afghanistan" (IWA) reveló que en los últimos tres años los sobornos se duplicaron en Afganistán y la corrupción ya resta al Producto Interno Bruto (PIB) del país 1.000 millones de dólares.
Según el sondeo, uno de cada siete adultos -un total de 1.677.000- ha sufrido sobornos y el 72 por ciento de la población considera que el sector público es el más corrupto.
La mayoría de los sobornos están relacionados con la Policía, la Justicia y la Administración, pero en los sectores educativo y sanitario ascienden de media a 180 dólares, una fortuna para gran parte de la depauperada población afgana.
La mitad de los encuestados cree además que la corrupción alimenta la expansión talibán en Afganistán, y un tercio de ellos cree que causa conflictos locales, relacionados en la mayoría de los casos con parcelas de terreno.
Otro dato preocupante es que el 31 por ciento recurre a la "polarización étnica" para conseguir acceso a servicios públicos: es decir, aprovecha su pertenencia a una etnia o tribu para ser favorecido.
El estudio concluye con una serie de recomendaciones para fortalecer el Estado de Derecho y luchar contra la corrupción en vistas a la celebración de la Conferencia de Kabul, prevista para el 20 de julio.