Multimillonaria certifica sordera casi total y no entrega detalles en caso L'Oréal

PARÍS.- La heredera de la multinacional francesa de cosméticos L'Oréal, Liliane Bettencourt, no aportó detalles a las investigaciones sobre la posible financiación ilegal del partido del Presidente Nicolas Sarkozy durante su campaña electoral.

Según informa el diario galo "Le Monde", durante el interrogatorio llevado a cabo por la Policía, la mujer dio la impresión de no tener una idea clara de su patrimonio y de sus asuntos financieros.

La heredera, de 87 años, no pudo dar datos concretos sobre las acusaciones de que hizo donaciones de forma irregular a la campaña electoral de Sarkozy.

"Se trata de recuerdos que datan de hace mucho tiempo. Ya no tiene todos los detalles en mente", señaló el abogado de Bettencourt, Georges Kiejman. El letrado entregó además a la Policía un certificado médico según el cual la rica heredera sufre de sordera en un 99,8 por ciento.

Bettencourt no habló en las dos horas de su comparecencia de la posible financiación ilegal. "Las donaciones políticas eran asunto de su marido", argumentó Kiejman. No se dieron a conocer detalles sobre la forma como se llevó a cabo el interrogatorio, en el que no estuvo presente el abogado.

Según "Le Monde", la Policía encontró durante la posterior inspección un documento en el que se señalaba que Bettencourt quería dejar en herencia a su ex contable Claire Thibout dos departamentos.

Los abogados de Thibout creen que se trata de documentos falsos que buscan minar la credibilidad de su cliente. Las declaraciones de la ex contable dieron inicio al actual escándalo.

Thibout corrigió después parcialmente sus declaraciones, pero insiste en que el actual ministro de Trabajo, Eric Woerth, recibió 150.000 euros (195.000 dólares), para la campaña electoral de Sarkozy. Woerth comparecerá en breve.