ROMA.- El ministro de Defensa, Ignazio La Russa, confirmó hoy que la intención de Italia es la retirada de Afganistán de sus tropas a finales de 2011, pero permanecerán algunos militares sólo para labores de adiestramiento del Ejército y Policía afganos.
Así lo refirió hoy durante su comparecencia en el Parlamento para explicar la dinámica del atentado en que el pasado sábado murieron cuatro militares en el distrito de Gulistan, al sur de Afganistán.
La Russa explicó que a finales de 2011 se podrá entregar a las autoridades afganas el control de gran parte del territorio de la región oeste del país, actualmente bajo el mando del Ejército italiano, que tiene base en Herat.
A partir de esa fecha, La Russa añadió que se pasará a una misión sólo de instrucción del Ejército y la Policía locales, y que no se excluye que se puedan enviar a más adiestradores.
Sobre la posibilidad, que actualmente se está analizando, de dotar con bombas los aéreos italianos, que hasta ahora vuelvan desarmados, el titular de Defensa afirmó que se tratará de una decisión que tendrá que ser tomada con un amplio consenso del Parlamento.
La Russa explicó que Italia se ha opuesto a armar los bombardeos para evitar que se produjesen víctimas civiles, y subrayó que "ningún militar italiano ha ido más allá del uso legítimo de las armas y no se han causado nunca víctimas civiles”.
En cuanto a la posibilidad de armar a los bombarderos italianos se han mostrado contrarios tanto las formaciones en la oposición Partido Demócrata (PD) e Italia de los Valores (IDV), mientras que la Unión de Centro (UDC) se ha dicho partidaria.
Durante su comparecencia, el ministro de Defensa explicó que los cuatro militares murieron cuando el vehículo fue alcanzado por un artefacto explosivo, mientras retrocedía al verse atacado por un grupo de unos 30 insurgentes en la zona del Gulistan.
