BUENOS AIRES.- Los médicos que atendieron ayer de urgencia al ex presidente argentino Néstor Kirchner intentaron resucitarlo durante 45 minutos, según lo indicado por fuentes cercanas al desaparecido líder del Partido Justicialista.
Kirchner, de 60 años, se encontraba en su residencia de descanso de la sureña localidad de El Calafate, cuando sufrió un infarto masivo.
El Gobierno no ha divulgado ninguna versión oficial sobre las circunstancias en que se produjo la muerte del ex mandatario, pero medios locales desvelaron hoy detalles sobre las últimas horas de Kirchner.
De acuerdo a distintas versiones, el matrimonio presidencial cenó en su residencia de El Calafate con un grupo de amigos y se retiró a descansar.
A primera hora de la mañana, Kirchner se habría sentido mal y su esposa, la Presidenta Cristina Fernández, habría llamado a una ambulancia, que arribó de inmediato y escoltada por la policía se trasladó al hospital municipal José Formenti.
El ex gobernante llegó al hospital con signos vitales "muy débiles", destacaron los diarios Clarín y Página/12. Allí, según el primer rotativo, los médicos intentaron reanimarlo con un desfibrilador y establecieron contacto telefónico con el médico presidencial, Luis Buonomo, que se encontraba en Buenos Aires, pero se rindieron después de 45 minutos de maniobras de resucitación.
El parte firmado por Luis Buonomo aseguró que Kirchner murió de un "paro cardiorrespiratorio no traumático que no respondió a las maniobras de resucitación básica y avanzada".
Después, la jefa de Estado habría ordenado que condujeran de nuevo el cuerpo a la residencia familiar para esperar la llegada de sus hijos, Máximo y Florencia -que viajó desde Estados Unidos- y efectuar una ceremonia íntima de despedida para quien fue su esposo durante los últimos 35 años.