MÉXICO.- Los narcotraficantes mexicanos han ampliado sus fuentes de ingresos utilizando a mujeres para el trasiego de drogas, la prostitución o vendiéndolas a organizaciones criminales de otros países, dijeron el jueves funcionarios de la secretaría de Gobernación de México.
Esos delitos son para los narcotraficantes "una fuente que les genera ingresos muy altos y que es inagotable", dijo a la prensa extranjera Omeheira López, titular de la Unidad de Promoción y Defensa de Derechos Humanos de la Gobernación.
A raíz de ello, en México los inmigrantes indocumentados están en una situación de "mucha vulnerabilidad", reconoció de su lado Felipe de Jesús Zamora, subsecretario de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de Gobernación con motivo de la puesta en marcha de un programa nacional para prevenir la trata de personas.
Según la Comisión Nacional de Derechos Humanos (estatal), sólo de septiembre de 2008 a febrero de 2009 registró el secuestro de casi 10.000 indocumentados, a manos presuntamente de integrantes del cartel de "Los Zetas".
Zamora destacó que lo más grave del problema es que las víctimas en muchas ocasiones ni siquiera están concientes de lo que son, y recordó el caso de una venezolana y una argentina que vinieron a México bajo engaños "y al darse cuenta de su realidad, se culparon a sí mismas".
"La víctima cree que al denunciar queda expuesta", añadió. Pocos son los indocumentados que saben que en caso de sufrir violaciones a sus derechos humanos pueden obtener una visa humanitaria para poder seguir con el proceso de denuncia, concluyó.
En agosto pasado 72 inmigrantes de Centro y Suramérica fueron secuestrados y masacrados en Tamaulipas, en el noreste de México. Uno de los sobrevivientes dijo que el crimen lo cometieron integrantes del cartel de Los Zetas, a raíz de que los indocumentados rehusaron trabajar para esa organización y de que no pudieron cobrar un rescate por su liberación.