TUCSON.- Una mujer no identificada se enfrentó al sujeto que el sábado le disparó a 20 personas en Arizona, y cuando éste intentaba volver a cargar su arma, le arrebató el cargador de la mano para tratar de detener la masacre, dijeron las autoridades.
La mujer resultó herida en la lucha, pero habría sido "una catástrofe enorme, si él hubiera tenido éxito", dijo Clarence Dupnik, comisario del condado de Pima en Tucson, Arizona, donde ocurrió el tiroteo.
El hombre había disparado ya un proveedor completo de 31 balas de un arma Glock 9 mm ante una multitud de personas que se habían reunido en un estacionamiento de un centro comercial en Tucson, para asistir a un mitin de la legisladora Gabrielle Giffords.
Giffords, de 40 años, una demócrata que había sido reelecta en noviembre, recibió un disparo en la cabeza y 19 personas más resultaron heridas en el ataque. De éstas, seis murieron, entre ellas, un juez federal y una niña de 9 años de edad.
Dupnik dijo que después de que la mujer arrebató el cargador de la mano del atacante, éste sacó otro y logró recargar el arma.
"Afortunadamente, el cargador falló, y dos caballeros fueron capaces de sacárselo y reducir al atacante hasta que las fuerzas del orden llegaron", dijo Dupnik.
El agresor, que fue detenido, ha sido identificado como Jared Loughner, un residente local de 22 años de edad con antecedentes de denuncias incoherentes al gobierno en internet.
Dupnik dijo que Loughner había mantenido correspondencia con la oficina de Giffords en 2007, y había sido invitado a asistir a un evento similar al que la congresista realizaba el sábado cuando estalló el tiroteo.
