MANILA.- Las fuertes lluvias e inundaciones en el sur y centro de Filipinas han dejado 42 muertos y dañaron cosechas e infraestructura por más de 23 millones de dólares.
Inundaciones y deslaves causados por más de dos semanas de fuertes lluvias a fines de diciembre y comienzos de enero han desplazado a casi 400 mil personas, dijo Benito Ramos, jefe de la agencia gubernamental de emergencias.
Las importantes áreas de producción de arroz y maíz en el norte y el oeste del país quedaron a salvo de las inundaciones.
La mayoría de los muertos fallecieron ahogados o fueron sepultados por aludes, dijo Ramos. Cinco personas siguen desaparecidas, entre ellos tres pescadores.
Alrededor de un tercio de las 80 provincias del país ha sido afectado por las lluvias, que han destruido caminos y puentes, pequeñas granjas productoras de arroz y maíz y viviendas precarias, concluyó.