SIDNEY.- La localidad de Horsham en el sureste de Australia se encuentra hoy partida por la mitad a causa de las peores inundaciones en 200 años que afectan desde el fin de semana al estado de Victoria, informaron fuentes oficiales.
El río Wimmera se desbordó a su paso por el centro del pueblo y lo dividió en dos, dejando incomunicados y sin suministro eléctrico a la mayoría de los 14.000 ciudadanos.
Los servicios de emergencia indicaron que el agua ha llegado ya a un metro de altura en algunos distritos, y esta tarde se esperan más riadas.
Horsham, 300 kilómetros al noroeste de Melbourne, es una de las 51 comunidades anegadas por las riadas en Victoria, cuyos habitantes se esperan para que los peores aguaceros lleguen en la noche del jueves al viernes.
Mientras tanto, continúan los trabajos de limpieza en el estado de Queensland, que tiene sumergido afectado tres cuartas partes de su territorio, un área del tamaño de Alemania y Francia juntas.
Las inundaciones costaron allí la vida a 20 personas -31 desde noviembre-, dañaron unas 28.000 casas y provocaron destrozos en numerosas industrias, cultivos, e infraestructuras en una región de minas de carbón.
El banco australiano ANZ advirtió de que el coste puede superar los 20.000 millones de dólares, y el Gobierno de Camberra estudia cómo incluir una partida especial en el presupuesto para el año fiscal que arranca en julio y debe presentar antes del próximo 10 de mayo.
La primera ministra, Julia Gillard, anunció que el ministro del Tesoro, Wayne Swan, presidirá el grupo de expertos que se encargará de supervisar las labores de reconstrucción junto a miembros de las principales empresas y sectores industriales del país.
Según los meteorólogos, este año las lluvias han sido peores de lo habitual a raíz del fenómeno de La Niña, que enfría las corrientes marinas del Pacífico y aumenta la intensidad de las precipitaciones.