BEIRUT.- El primer ministro qatarí, Hamad bin Jasin Bin Jaber al Tahni, y el ministro de Exteriores turco, Ahmed Davutoglu, regresaron hoy a sus respectivos países poniendo fin a su mediación en la crisis libanesa debido a "ciertas reservas".
Antes de abandonar el Líbano, los dos dirigentes publicaron un comunicado en el que explican que regresan a sus países para consultar a sus líderes, según la Agencia Nacional de Información libanesa (ANN).
Al Tahni y Davutoglu "redactaron un texto que toma en consideración las exigencias políticas y jurídicas para resolver la crisis libanesa en base a la iniciativa sirio-saudí, pero decidieron detener sus tentativas a causa de ciertas reservas", agregó la ANN.
Ambos llegaron hace dos día al Líbano para tratar de encontrar una salida a la crisis que vive el país tras la caída del gobierno por la dimisión de diez ministros de la oposición, liderada por Hizbulá, y uno designado por el presidente libanés, Michel Suleiman.
Los dirigentes qatarí y turco se entrevistaron con Suleiman, así como con el jefe del Parlamento, Nabih Berri, y con el primer ministro saliente, Saad Hariri, en un intento de lograr un acuerdo tras el anuncio del fracaso de la iniciativa sirio-saudí.
Esta renuncia se suma a la de Arabia Saudí, cuyo ministro de Exteriores, Saud al Faisal, reveló ayer que su país había decidido abandonar los esfuerzos de mediación que mantenía junto a Siria para resolver la crisis política libanesa y advirtió de la gravedad de la situación en este país.
Líbano afronta una grave crisis política a raíz del asesinato, en 2005, del ex primer ministro Rafic Hariri, que es investigado por el Tribunal Especial para el Líbano (TEL).
Según filtraciones recogidas por los medios locales, en el acta de acusación del TEL, presentada el pasado 17 por el fiscal Daniel Bellemare al juez Daniel Fransen, podrían aparecer los nombres de miembros de Hizbulá.
