DUBLÍN.- Cuatro ministros del Gobierno irlandés presentaron su dimisión y tampoco se presentarán a las próximas elecciones generales -previstas para la primavera-, según confirmó hoy jueves el portavoz del Primer Ministro Brian Cowen.
Aunque por diferentes motivos, los cuatro siguen la decisión tomada por el ex titular de Asuntos Exteriores, Michéal Martin, quien presentó este martes su dimisión tras no lograr desbancar a Cowen del liderazgo del partido gobernante Fianna Fáil (FF).
Se trata del ministro de Justicia, Dermot Ahern; de Transporte, Noel Dempsey; de Defensa, Tony Killeen; y de Sanidad e Infancia, Mary Harney, aunque esta última no pertenece al FF.
Según fuentes oficiales, el "Taoiseach" (Primer Ministro), quien asumió la cartera de Exteriores, intentará cubrir durante los próximos "dos días" las vacantes dejadas por sus compañeros, partidarios todos ellos, excepto Martin, de su liderazgo.
Los medios irlandeses señalan hoy que las dimisiones en masa son una estrategia del partido diseñada para "maquillar" su imagen de cara a los comicios generales y que Cowen lo tenía previsto antes de la moción de confianza a la que se sometió este martes.
También opinan que con esta maniobra, Cowen neutralizará los intentos del Partido Verde, socio minoritario en el Ejecutivo, de bloquear una remodelación del Gobierno, pues los ecologistas creen que, en lugar de lavar su imagen, la empeorará.
Las últimas encuestan otorgaban al FF un apoyo de entre el 10 y el 14 por ciento, el más bajo de su historia, lo que podría traducirse en la pérdida de más de 20 de los 71 diputados que tiene en el Parlamento de Dublín (Dáil).
Cowen convocará elecciones cuando el Dáil finalice el proceso de aprobación de los presupuestos generales para 2011, clave para acceder a los 65.000 millones de euros ofrecidos por la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) para el rescate de este país.
Este proceso, que culminará con la introducción de la nueva Ley de Finanzas, podría concluir en febrero, lo que permitiría celebrar elecciones en marzo o abril, según ha indicado el "Taoiseach".
El Partido Verde, no obstante, ha calificó de "inaceptable" la posibilidad de que los comicios se retrasen hasta abril.
Su líder, John Gormley, ha reconocido que la citada ley está presentando "ciertas dificultades", aunque ha insistido en que éstas son "superables" y que la cita con las urnas debería fijarse para finales de marzo, "con o sin remodelación" del Gobierno.