NAIROBI.- A pesar de dos exitosos operativos recientes por parte de Malasia y Corea del Sur, en los que se rescataron dos barcos y a sus tripulantes de manos de piratas somalíes, la Fuerza Naval de la Unión Europea (UE) no aplicará los mismos procedimientos porque tales incursiones podrían poner en mayor peligro a los rehenes.
La Marina de Malasia mantenía bajo custodia a siete piratas somalíes que fueron aprehendidos cuando sus efectivos tomaron por asalto el buque cisterna de bandera malaya MT Bunga Laurel, el viernes por la mañana, poco después de que los piratas secuestraron el buque en el Golfo de Adén con fusiles de asalto y pistolas.
Los soldados malayos hirieron a tres piratas y rescataron a los 23 tripulantes en la operación.
El mismo día tuvo lugar otro espectacular asalto por parte de fuerzas sudcoreanas que liberaron a un carguero que había estado secuestrado durante una semana. Los efectivos de Corea del Sur mataron a ocho piratas y capturaron a otros cinco. También quedaron en libertad 21 tripulantes del Samho Jewelry, ocho de los cuales eran surcoreanos.
El portavoz de la Armada de la Unión Europea, el teniente coronel de aviación Paddy O'Kennedy, dijo que a pesar de estos éxitos, la fuerza armada no cambiaría su posición respecto a la lucha contra los piratas.
"Nuestras prioridad es la seguridad de los rehenes. Los piratas están usando a los rehenes como escudos humanos, y si nos acercamos demasiado, amenazan con matar a los prisioneros. Estoy seguro de que cumplirán sus amenazas si nos acercamos demasiado", dijo O'Kennedy.