LONDRES.- En un intento de abaratar los costos de la sanidad, el Gobierno británico recomendará a los pacientes que se examinen en casa y describan sus síntomas por correo electrónico al médico de cabecera.
Así lo informa hoy el diario Daily Mail, según el cual se propondrá incluso a los enfermos que padecen problemas cardiovasculares, pulmonares o diabetes que se midan su presión sanguínea, sus niveles de glucosa o su temperatura y envíen los datos al médico.
El Gobierno trata así de evitar consultas innecesarias con la esperanza de ahorrarse el equivalente de hasta 1.180 millones de euros al año, lo que permitiría a los médicos concentrar sus esfuerzos en los enfermos más graves.
Las autoridades sanitarias han enviado ya a miles de pacientes pequeños aparatos electrónicos de fácil manejo con los que hacer ese tipo de diagnóstico casero.
Sin embargo, la Asociación Médica Británica ha advertido del peligro de que decaigan los estándares sanitarios con esos diagnósticos a distancia y critica que los médicos tengan que dedicar buena parte del tiempo a contestar los correos electrónicos en lugar de examinar directamente a los pacientes.
"Mi preocupación es que un paciente no se percate de la gravedad de la enfermedad que sufre ni tampoco se dé cuenta el médico que se limite a leer sus mensajes", señala el doctor Laurecence Buckman, directivo de la asociación.
Por su parte, Katherine Murphy, directora ejecutiva de la Asociación de Pacientes, califica esos planes del Gobierno de "peligrosos" porque uno no puede fiarse ciegamente de las lecturas que se hagan en casa.
Según el tabloide británico, muchos consultorios se están valiendo por otro lado de "call center" o centros de llamadas situados en el extranjero para responder a los pacientes que quieren una cita con el médico.