SEÚL.- Sudcorea dijo hoy que Corea del Norte debe presentar, durante la prevista reunión militar de trabajo, una disculpa "aceptable" por su ataque de noviembre sobre la isla de Yeonpyeong y el hundimiento en marzo de la corbeta "Cheonan".
El ministro surcoreano de Exteriores, Kim Sung-hwan, dijo que el nivel de la disculpa norcoreana por los dos incidentes con víctimas del pasado año "debe ser al menos aceptable para nuestro pueblo", según informó la agencia local Yonhap.
Después de varias llamadas norcoreanas a un diálogo bilateral sin condiciones desde que comenzó 2011, la semana pasada Seúl aceptó la propuesta de Pyongyang de celebrar un encuentro militar de alto nivel, que iría precedido de una reunión de trabajo preparatoria.
Seúl se ha comprometido a proponer esta semana una fecha concreta para esa primera reunión, con el objetivo de que se traten los detalles del encuentro de alto nivel que podría tener lugar en febrero.
El Gobierno de Seúl ha condicionado la mejora de las relaciones entre las dos Coreas a que Pyongyang se disculpe por el ataque de artillería sobre la isla fronteriza de Yeonpyeong, que causó cuatro muertos en el Sur, y por el hundimiento del navío "Cheonan" en marzo, en el que fallecieron 46 tripulantes.
El régimen comunista de Kim Jong-il ha reiterado que el lanzamiento de obuses sobre Yeonpyeong, en el Mar Amarillo, fue en respuesta a una provocación de Corea del Sur, que realizaba maniobras navales en las inmediaciones.
Además, niega rotundamente que un submarino de su Ejército lanzara un torpedo y hundiera el "Cheonan", argumento que apoya Seúl en base a una investigación multinacional.
Corea del Sur también pide que el régimen norcoreano demuestre su compromiso de desnuclearizarse mediante acciones.
Según Yonhap, Corea del Sur planea proponer conversaciones bilaterales con el Norte para hablar de su programa nuclear, después de que Pyongyang anunciara que está enriqueciendo uranio para un fin civil.
Incluso China, principal aliado de Pyongyang, ha mostrado su preocupación por el programa de uranio norcoreano, que permitiría a Kim Jong-il aumentar sus posibilidades de obtener armamento atómico y que se sumarían al procesado de plutonio que lleva a cabo.