JERUSALÉN.- El Ejército israelí demolió en 2010 el triple de viviendas que el año anterior en el Área C de Cisjordania -sobre la que mantiene control civil y militar-, según datos de la ONG israelí Betselem difundidos hoy por el diario israelí Haaretz.
El pasado año, la denominada Administración Civil (cuerpo militar israelí que gestiona los asuntos civiles en la Cisjordania ocupada) echó abajo 86 viviendas, entre ellas varias chabolas, frente a los 28 hogares palestinos que destruyó en 2009.
Según Betselem, cerca de medio millar de palestinos, incluidos 223 niños, perdieron sus casas como resultado de esta política en el Área C, en la que vive el 60 por ciento de la población de Cisjordania.
"Israel retiene control sobre la planificación urbanística en ese área y es virtualmente imposible para los palestinos conseguir permisos de construcción", explicó la portavoz de Betselem, Sarit Michaeli.
Según Michaeli, las autoridades israelíes "invierten muchos recursos en promover los asentamientos judíos en esa zona mientras que impiden el desarrollo de las comunidades palestinas, a las que ponen innumerables trabas para crecer y expandirse, por lo que hay un gran fenómeno de construcción ilegal".
Michaeli considera que la peor situación la viven las comunidades beduinas y nómadas que residen en el Valle del Jordán y en el sur de Hebrón, donde "no solo han aumentado las demoliciones, sino también la declaración de tierras como 'zona militar cerrada' y el acoso a los residentes, que llevan a un desplazamiento forzoso de esas comunidades".
En declaraciones a Haaretz el abogado Shlomo Lecker atribuye el aumento de las demoliciones a la presión de los colonos judíos que viven en Cisjordania y de la organización de la derecha nacionalista Regavin, que acude a los tribunales israelíes para pedirles que emitan órdenes de demolición.