LA HABANA.- Cuba liberó el viernes a Guido Sigler, uno de los 11 presos políticos que rechazan el exilio en España, destrabando un lento proceso de liberación de 52 opositores que el Presidente Raúl Castro pactó con la Iglesia en mayo.
La Iglesia Católica había anunciado en la mañana la inminente liberación de Sigler, quien desea viajar a Estados Unidos, pero también la de Angel Moya, obrero de 46 años y esposo de Berta Soler -una líder de las Damas de Blanco-, que se quedará en Cuba y aún sin excarcelar.
Sigler, técnico en economía de 57 años, fue llevado la tarde del viernes por agentes de la seguridad del Estado a su casa en un pueblo de la provincia de Matanzas, a 140 km del oeste de La Habana, según la oposición.
"Voy a coordinar ideas y pensaré más tarde que podría hacer con mi vida. Si las enfermedades mías requieren tener que ir al exilio para curarme, no lo pensaría más de dos veces", dijo Sigler.
Las dos excarcelaciones, según una nota del Arzobispado de La Habana, dan "continuidad al proceso de liberación", iniciado en julio, de 52 disidentes que quedaban presos de un grupo de 75 condenados en 2003 a penas de cárcel de seis a 28 años, y considerados "presos de conciencia" por Amnistía Internacional.