YAKARTA.- La Policía de Indonesia anunció hoy la detención de 13 personas relacionadas con la oleada de violencia religiosa que ha sufrido en las últimas semanas la nación de mayor población musulmana del mundo.
Cinco personas de los arrestados están implicadas en el asesinato de seis miembros de la secta Ahmadiyah en la isla de Java, después de que hallasen un video sobre el incidente en Youtube.
Más de un millar de islamistas asaltaron la casa de uno de los líderes de la organización y mataron a machetazos y pedradas a varios fieles.
Dos días después, 1.500 personas salieron a las calles de la ciudad de Temanggung para reclamar la pena de muerte para un cristiano recién condenado a cinco años de cárcel por blasfemar contra el Islam.
La encendida turba quemó dos iglesias y saqueó un colegio católico en Java Central en protesta, un incidente por el que la Policía ha detenido a ocho personas.
Estos actos han empañado la imagen de Indonesia, conocida por practicar un Islam moderado, y obligado al presidente, Susilo Bambang Yudhoyono, a exigir el fin de la violencia y abogar por desmantelar a los grupos radicales.
"Toda persona debe tener la garantía de sentirse protegida y a salvo sea cual sea su fe, procedencia, raza, ideología o profesión", declaró esta semana Yudhoyono.
El grupo radical Frente de Defensores del Islam advirtió ayer de que cualquier intento del Gobierno para desarmarles acarreará la caída del Presidente igual como ocurrió con el tunecino Ben Ali.
"Yudhoyono se convertirá en el Ben Ali de Indonesia. Indonesia se convertirá en otro Egipto", advirtió la organización extremista.