AMMÁN.- La oposición jordana alzó el tono acusando hoy sábado al Gobierno de ser poco serio en sus reformas, un día después de la mayor manifestación en la capital desde el comienzo de las protestas en enero.
El miembro del comité ejecutivo del Frente de Acción Islámico (FAI) Zaki Bani Irshaid advirtió al Ejecutivo "contra las repercusiones de una mala evaluación de las circunstancias políticas actuales".
"El régimen debe comprender que las reformas son la única vía para su supervivencia y cuanto más tarden, más aumentarán las demandas de reformas", declaró.
El FAI, principal partido de la oposición, reclama reformas similares a las formuladas por los partidos de izquierda, las asambleas tribales, los universitarios y los militares retirados.
Todos quieren "reformas constitucionales" y que se juzgue a los "corruptos", como exigen con una sola voz en las manifestaciones como la de ayer, que congregó a miles de personas (10.000 según los organizadores, 6 mil según la Policía) en Ammán.
Los islamistas quieren que el Primer Ministro sea elegido y no designado por el Rey como ocurre en la actualidad. La izquierda pide el restablecimiento de la Constitución de 1952, adoptada por el rey Talal, abuelo de Abdallah II, y enmendada 29 veces para dar mayores poderes a la monarquía.
"Vamos a alzar el tono frente a la falta de seriedad del Gobierno en la aplicación de un programa de reformas", añadió Bani Irshaid.
El FAI y la cofradía de los Hermanos Musulmanes prevén reunirse para "estudiar medidas", dijo, que incluyen "un plazo de un mes" para aplicar las reformas.
"Ya no confiamos en las pronesas del gobierno que intenta claramente ganar tiempo y calmar el juego sin hacer nada", añadió.