CIUDAD DE MÉXICO.- La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) de México solicitó a las autoridades correspondientes la protección para los familiares de los jóvenes asesinados y heridos el 31 de enero de 2010 en Villas de Salvalcar, en Ciudad Juárez, frontera con Estados Unidos.
El 31 de enero del año pasado un grupo de sicarios asesinó a tiros a 15 jóvenes que celebraban una fiesta de cumpleaños en una vivienda de la colonia popular Villas de Salvarcar en Ciudad Juárez y desde entonces se han registrado diversas masacres en esa urbe.
El organismo informó hoy en un comunicado que de las quejas presentadas y las investigaciones de la CNDH "se evidencia el temor fundado de once de los agraviados, de ser violentados en su integridad física y su vida junto con su familia".
Por este motivo, la institución defensora de los derechos humanos pide que se adopten las acciones legales para que las autoridades "de forma inmediata, utilicen los recursos humanos, técnicos y materiales que sean necesarios para tal efecto".
La CNDH recordó que la aplicación de estas medidas tienen un fundamento en diversos artículos de la Ley de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. Y precisó que esta medida buscar garantizar la seguridad física de esas familias y evitar que sean víctimas de acosos o actos intimidatorios, así como de agresiones "de difícil o imposible reparación".
La CNDH manifestó su rechazo a la violencia y mantiene su atención a las víctimas del delito, además de mantener un seguimiento al desarrollo de los hechos para dar su resolución. En las últimas semanas, la familia de la activista Josefina Reyes se vio obligada a salir de esta ciudad después del asesinato de seis de sus miembros, incluyendo la activista, y ante las amenazas de muerte en contra de otros allegados.