FUKUSHIMA.- Japón suspendió el miércoles una nueva maniobra destinada a impedir la fusión de un reactor en una planta nuclear averiada debido a un repunte peligroso en la radiación que forzó al retiro de los trabajadores de la instalación.
El jefe de Gabinete, Yukio Edano, informó que la maniobra enfriamiento de los reactores con agua fue interrumpida por el riesgo que representaba la radiación para los trabajadores.
Poco antes, las autoridades afirmaron que el 70% de las barras de combustible en uno de los seis reactores en la planta tenían daños considerables a consecuencia de la catástrofe causada por el terremoto y tsunami del viernes.
La agencia noticiosa oficial de Japón, Kyodo, informó que el 33% de las barras de combustible en un segundo reactor también estaban dañadas.
Por su parte se informó que el recinto de confinamiento del reactor 3 de la central nuclear de Fukushima fue "parcialmente dañados".
Se precisó que el humo que se vio sobre el reactor 3 era "sin duda vapor".
Un nube de humo fue vista la mañana del miércoles sobre la central, donde cuatro reactores están dañados tras el terremoto.
Las autoridades anunciaron que recurrirían a helicópteros y camiones de bomberos para continuar arrojando agua en una acción desesperada por enfriar los reactores y evitar fugas de radiación.
La crisis nuclear ha provocado una alarma internacional y de alguna manera ha opacado la tragedia humana causada por el doble desastre natural del viernes, el cual prácticamente pulverizó el litoral nororiental de Japón y habría dejado unas 10.000 muertes.