SAN SALVADOR.- Las medidas de seguridad se intensificaron este lunes la capital de El Salvador con la presencia de soldados y policías y el sobrevuelo de helicópteros militares estadounidenses, un día antes de la llegada del Presidente Barack Obama, quien abandonará Santiago durante la mañana de este martes.
El líder Obama llegará a San Salvador al mediodía local para iniciar una visita de dos días.
Tanto los alrededores de la Casa Presidencial como el hotel donde se hospedará Obama lucen rodeados de agentes, vehículos policiales y soldados de la Fuerza Armada que patrullan a pie, portando sus fusiles de asalto.
La catedral de San Salvador, ubicada en pleno corazón de la ciudad, adonde Obama acudirá la mañana del miércoles junto a su esposa y sus dos hijas para visitar la tumba del asesinado arzobispo Oscar Arnulfo Romero, también es custodiada en sus contornos por fuerzas de seguridad locales.
Distintas calles de la capital, por donde se prevé transite la caravana de Obama, han sido inusualmente reparadas de baches, mientras que edificios que rodean la catedral han sido pintados y las aceras lucen limpias.
Por una orden del gobierno, los autobuses de transporte colectivo que antes saturaban las calles aledañas a la catedral, desde hace una semana fueron desviados por otras zonas de la ciudad con el propósito de aliviar el tráfico.
Fuera de San Salvador, la seguridad en el Aeropuerto Internacional El Salvador (44 km al sur de la capital) también ha sido redoblada con policías y soldados.
El sitio arqueológico de San Andrés, 40 km al oeste de San Salvador, que también será visitado por la familia Obama, es fuertemente custodiado y permanecerá cerrado al público desde este lunes y hasta el jueves.
El Congreso salvadoreño aprobó dos días de asueto para los empleados estatales y municipales el martes y miércoles en los centrales departamentos de San Salvador y La Libertad, mientras que las escuelas también suspenderán sus clases.