MANILA.- Un niño de 12 años fue liberado al sur de Filipinas después de pasar más de dos días cautivo en la selva junto a otros once rehenes, todos profesores y estudiantes secuestrados el pasado viernes, indicaron hoy fuentes oficiales.
El alcalde de la localidad de Prosperidad, Albin Magdamit, señaló que la liberación del pequeño Marvin Jay Corvera animó a las autoridades a continuar la negociación con los secuestradores, miembros de la tribu de los Manobo, que el domingo por la noche dejaron marchar a dos de los profesores.
Magdamit dijo que el pequeño ha sido ingresado en un hospital local porque se encuentra "muy enfermo".
El alcalde explicó que el padre de uno de los secuestradores, nombrado jefe del equipo negociador, llevó víveres al lugar del secuestro y convenció a los captores para que le dejaran llevarse al niño con él.
Casi todos los rehenes son profesores de educación primaria, pero continúa cautiva una niña de diez años que también ha enfermado.
Las autoridades filipinas excarcelaron el domingo a Ondo Pérez, un secuestrador condenado, ya que ésa era la principal demanda de los captores, según la Policía.
El líder de los secuestradores es Reyjoy Brital, un ex guerrillero comunista enfrentado a las autoridades desde finales de 2009, cuando Ondo Pérez tomó a 79 rehenes en venganza por el asesinato de varios integrantes de su familia a manos del cabecilla de otra tribu en la misma población de la provincia de Agusan del Sur.
En aquella ocasión, los negociadores gubernamentales prometieron a Pérez que no sería detenido si dejaba salir a todos con vida, pero finalmente fue arrestado y encarcelado.
Casos como éstos son habituales en Filipinas, sobre todo en el sur, donde el secuestro se ha convertido en un negocio para muchos criminales y clanes rivales solucionan a tiros sus disputas ante la corrupción y el temor de las fuerzas de seguridad y jueces.