LA COURONNE, Francia.- Un helicóptero teledirigido con cámaras y sensores de radioactividad, será enviado a Japón el fin de semana para sobrevolar la central nuclear de Fukushima, siniestrada por el sismo y el tsunami del 11 de marzo pasado.
Desde hace una semana el taller de 500 m2 donde antiguamente funcionaba una papelería en La Couronne, sudoeste de Francia, registra una actividad febril.
En medio de las piezas y herramientas, cuatro personas se afanan en torno a un helicóptero de aeromodelismo al que están preparando para una misión muy particular pues sobrevolará la central nuclear de Fukushima, norte de de Japón, que expulsa fuertes dosis de radiactividad.
"Este helicóptero de motor térmico estará equipado con cámaras infrarrojo y s ensores de radioactividad que suponen entre tres y cuatro kilos de material", explicó Laurent Grenier, director de Helipse, la pequeña empresa creada en 2001 por amantes del aeromodelismo.
Dotado de un rotor de 1,90 metros de diámetro, el helicóptero mide 2,2 metros de largo.
La aventura hacia Fukushima comenzó cuando la empresa estadounidense Rotomotion, socia de Helipse, pidió a esta empresa francesa que preparara un vehículo aéreo sin piloto o UAV, en la jerga aeronáutica ("Unmanned aerial vehicle").
"Desde el jueves estamos preparando de urgencia el helicóptero. Los días son largos y las noches cortas", confiesa Grenier que acompañará el aparato hasta Tokio para prepararlo a la misión y formar al personal que lo dirigirá cerca de la central nuclear, a 250 km de la capital nipona.
"En un primer momento, nos acercaremos a una distancia 'de seguridad' para medir la radiactividad y probablemente tomar imágenes infrarrojo que indiquen los puntos más calientes", agregó.
Aunque no descarta que se decida hacer otras mediciones una vez en el lugar. Luego sólo bastará con equipar el helicóptero con los aparatos de medida adaptados.
En Helipse, experimentada empresa, no están preocupados por la viabilidad del vuelo. En cambio la influencia de la radiactividad en la parte electrónica sigue siendo un "interrogante".
Rotomotion no precisó para qué servirán exactamente los datos que recoja el helicóptero.
"Haremos lo que sabemos hacer dando el máximo pero sabemos muy bien que este helicóptero no resolverá el problema", sostuvo Grenier.
Helipse ya transmitió sus conocimientos al grupo francés de electricidad EDF que quería inspeccionar mediante un helicóptero similar sus represas hidroeléctricas.
La pequeña empresa francesa también es capaz de tomar imágenes en tres dimensiones (3D) combinando fotos clásicas y mediciones a distancia por láser.
El helicóptero que Helipse enviará a Japón puede ser programado previamente y luego ejecutar un programa sin ninguna intervención humana.
Evitando el riesgo de perder la conexión en el caso de un aparato que debe ser teledirigido de forma permanente.
El precio de un ejemplar de este helicóptero oscila entre 20 y 50.000 euros (72.000 dólares) según el equipo que se le agregue.
Todo un premio a la perseverancia de Helipse que acaba de contratar a dos empleados más porque los pedidos empiezan a sumarse. Una buena noticia para la pequeña empresa que en 2009 sufrió un bajón en su actividad debido a dificultades financieras.