QUITO.- La embajadora de Estados Unidos en Ecuador, Heather Hodges, dejó hoy martes Quito, cumpliendo el pedido de su Gobierno de que abandone su territorio a la brevedad, tras ser declarada persona non grata, por revelaciones de Wikileaks.
"Ha sido un orgullo trabajar en Ecuador", dijo satisfecha de su gestión que finalizó abruptamente con esta medida.
Hodges llegó a primera hora al terminal aeroportuario de Quito, acompañada por un buen número de funcionarios de la misión diplomática estadounidense.
Sonriente, evaluó que su estadía de 32 meses le sirvió para "querer y trabajar mucho por este país.
"Evadió hacer una evaluación de las múltiples críticas que han hecho voceros de gobierno sobre sus consideraciones reveladas en Wikileaks. Al contrario, expresó que Ecuador es un país "que puede tener un futuro mejor. Eso es muy posible" y que se lleva el conocimiento de una nación con una "belleza increíble".
Hace una semana, el diario español "El País" difundió el contenido de mensajes de supuesta autoría de la embajadora Hodges, los que afectaban la imagen del presidente de Ecuador, Rafael Correa.
En uno de ellos, Hodges aseguraba que era criterio de funcionarios de la embajada que el primer mandatario conoció de actos de corrupción del general Jaime Hurtado, a sabiendas de lo cual, le designó comandante de la Policía, para poder "manipularlo".
El Gobierno ecuatoriano decidió por ello declarar a la representante de Washington persona no grata y pedirle que salga de Ecuador a la brevedad. En reciprocidad diplomática Washington adoptó la misma postura ante el embajador ecuatoriano en Washington, Luis Gallegos, quien retornará a Ecuador el próximo viernes.