DUBLÍN.- En el segundo día de su histórica visita a Irlanda, la reina Isabel II de Inglaterra hizo un llamado a la reconciliación y manifestó sus "profundas condolencias" para todas las víctimas del extenso conflicto británico-irlandés.
"Al tener una visión histórica podemos ver todas las cosas que desearíamos se hubiesen hecho de manera diferente o que no hubiesen ocurrido", dijo la monarca, de 85 años, en el único discurso previsto en el viaje de cuatro días, durante un banquete de Estado en el Castillo de Dublín.
El primer ministro británico, David Cameron, quien también asistió a la cena de Dublín, describió la visita de Estado de la reina a Irlanda como "enormemente exitosa y muy significativa".
Asimismo, agregó que la visita será una oportunidad para hacer planes para el futuro.
Con numerosos gestos y visitas simbólicas, Isabel II abogó durante el día por la reconciliación y la colaboración entre los dos países.
Isabel II visitó, entre otros, un estadio deportivo en Dublín, que en 1920 fue escenario de una masacre de irlandeses por parte de soldados británicos.
Ese día fue en Irlanda durante décadas símbolo de la opresión británica.
Previamente, la reina dirigió la mirada a un capítulo con frecuencia olvidado de la historia británico-irlandesa.
Isabel II colocó una corona en un memorial para los casi 50.000 soldados irlandeses, que combatieron en la Primera Guerra Mundial para los británicos y perdieron la vida en el conflicto.
La reina y su esposo, el príncipe Felipe, de 89 años, visitaron Irlanda invitados por la presidenta Mary McAleese.