LA HAYA.- El Gobierno holandés decidió hoy viernes prolongar tres meses, hasta finales de septiembre, su participación en la misión de la OTAN en Libia, en la que está presente seis aviones de combate F-16 y un dragaminas.
El Ejecutivo considera que la intervención militar "sigue siendo necesaria porque el régimen del líder libio Moammar Jaddafi continúa significando una amenaza para la población".
Holanda participa en la misión de la OTAN en Libia desde el pasado marzo, y su intervención -con un total de 200 militares- se limita a garantizar el embargo de armas en Libia, sin que sus aviones intervengan en bombardeos.
La organización decidió el pasado 1 de junio prolongar su misión en ese país africano durante tres meses, a lo cual se ha sumado hoy Holanda.
La decisión, tomada en el consejo de ministros, está apoyada por una mayoría en el Parlamento holandés.
Si bien los demócrata-liberales en la oposición (D66, 10 escaños) opinan que el país debería además participar activamente en ofrecer ayuda humanitaria a la población y los liberales en el Gobierno (VVD, 31 escaños) creen que también se debería participar en los bombardeos.