CANBERRA.- La Primera Ministra de Australia, Julia Gillard, descartó reunirse en esta semana con el Dalai Lama en una acción que seguramente complacerá a China, el principal socio comercial del país oceánico. Sin embargo, esto podría generarle dificultades con un simpatizante crucial de su gobierno: el Partido Verde.
La Premier puso fin a las especulaciones en cuanto a si se reuniría mañana con el líder espiritual del Tíbet cuando visite Canberra, la capital del país.
"Los primeros ministros de Australia no se han reunido con el Dalai Lama en todas las ocasiones que ha visitado el país", informó su oficina a través de un comunicado.
En su lugar, un legislador del partido gobernante sostendrá una cita privada con el monje budista de 75 años, aunque no se dio a conocer el nombre de ese legislador.
"Debido a la frecuencia de sus viajes a Australia, el Gobierno considera que los acuerdos vigentes son apropiados", agrega el comunicado.
Los Premier anteriores sostuvieron encuentros extraoficiales con el líder espiritual, pero aún esos encuentros privados de bajo relieve han enfurecido a China, que compra enormes cantidades de materias primas australianas como hierro, carbón y gas natural.
El gobierno de Beijing no reconoce al Dalai Lama y con frecuencia lo denuncia indicando que desea la independencia del Tíbet.