WASHINGTON.- La causa penal contra el ex jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI) Dominique Strauus-Kahn, acusado de agresión sexual, está a punto de caerse, señaló el New York Times citando fuentes cercanas al caso este jueves.
Según el periódico, los fiscales no creen mucho en el testimonio de la presunta víctima de Strauss-Kahn y consideran que la mujer de Nueva Guinea ha mentido repetidas veces desde el 14 de mayo, cuando se produjo el presunto ataque.
Los fiscales probablemente dirán el viernes en la corte, cuando Strauss-Kahn hará una reaparición no anunciada antes de la próxima audiencia programada para el 18 de julio, que "tienen problemas con el caso", en contraste con la anterior confianza de acero que tenían en la evidencia en su contra, según el Times.
Se espera que en la audiencia del viernes el juez Michael Obus considere un cambio en las condiciones de la fianza que permitió a Strauss-Kahn, tras pagar una fianza de un millón de dólares, obtener la libertad bajo arresto domiciliario, que incluye la vigilancia 24 horas y una pulsera en el tobillo.
"Es un desastre, un desastre por ambas partes", dijo un funcionario al diario. Las revelaciones podrían significar un extraordinario giro para el ex director del FMI, en tanto el periódico dijo que podría ser liberado de su arresto domiciliario, debido a las cuestiones que rodean a su acusadora.
El periódico dijo que funcionarios policiales habían detectado interrogantes relacionados con la solicitud de asilo de la camarera de hotel de 32 años, y vínculos no confirmados con la actividad criminal, tales como la participación en el lavado de dinero y el tráfico de drogas.
Varias personas hicieron depósitos en efectivo -que ascienden a unos 100.000 dólares- en la cuenta bancaria de la acusadora en los últimos dos años, y los fiscales habían grabado las conversaciones con la empleada, en las que discutía con uno de esos individuos el pago por las acusaciones de asalto sexual, según el informe.
Strauss-Kahn, de nacionalidad francesa, negó los siete cargos que incluyen el intento de violación de la mujer y agresión sexual cuando ella vino a limpiar su habitación en un lujoso hotel de Manhattan.