WASHINGTON.- Los multimillonarios Warren Buffett y Bill Gates presentaron hoy ante la Casa Blanca los avances de su propuesta filantrópica “Giving Pledge” ("Promesa de Dar"), mientras republicanos y demócratas continúan enfrentados por el intento de subir los impuestos a los contribuyentes de rentas más altas.
"Barack Obama discutió cómo la filantropía privada puede ayudar a encarar los grandes desafíos de la nación” afirmó Jay Carney, portavoz de la Casa Blanca, en una rueda de prensa diaria sin más precisiones.
En el encuentro, a puerta cerrada y del que no se emitió comunicado, estuvieron presentes Bill y Melinda Gates, Warren Buffett, Steve y Jean Case, Mark Zuckerberg y George Lucas, entre otros firmantes de la propuesta “Giving Pledge” en la que piden a los ricos que donen la mitad de su patrimonio a obras de caridad. Mientras tanto, republicanos y demócratas seguían enfrentados dentro de las negociaciones en torno a la reducción del déficit y la deuda nacional, cuyo tope debe ser elevado antes del próximo 2 de agosto ya que, de lo contrario, Estados Unidos se vería obligado a declararse en suspensión de pagos.
Los republicanos, mayoría en la Cámara de Representantes, anunciaron hoy que someterían mañana a votación el llamado plan de "Cortar, limitar y equilibrar”, en el que se condiciona la subida del tope de deuda a un mayor control del gasto público y se exige una enmienda constitucional que asegure presupuestos equilibrados.
Al contrario que Buffett y Gates, los republicanos han expresado su oposición frontal a cualquier acuerdo de reducción del déficit que incluya una subida de la carga impositiva para las rentas más altas, con el argumento de que son las principales generadoras de empleo. Poco después de conocerse la intención de los republicanos, la Casa Blanca salió rápidamente al paso y descartó la posibilidad de que el plan “Cortar, limitar y equilibrar” pueda salir adelante.
"Si al Presidente le fuera presentada esta ley para firmarla, la vetaría”, afirmó la Oficina de Presupuestos de la Casa Blanca en un comunicado. A continuación, Obama reiteró en una breve declaración su llamado a un acuerdo bipartidista y aseguró que el país no se puede permitir "que la política se ponga en el camino de hacer lo adecuado".