DADAAB.- La Unión Europea anunció hoy un aumento de su ayuda económica destinada a las víctimas de la sequía y el hambre en el Cuerno de África, e instó al resto de la comunidad internacional a "actuar rápidamente" para frenar la "situación dramática" que padece la región.
Durante una visita al campo keniano de refugiados de Dadaab (este), el mayor del mundo, la comisaria europea de Cooperación Internacional y Ayuda Humanitaria, Kristalina Georgieva, dijo que la Comisión Europea destinará 27,8 millones de euros más a "aliviar el sufrimiento" de las víctimas de la sequía.
La responsable de Cooperación Internacional europea aseguró que la Comisión Europea está movilizando otros 60 millones de euros para tratar de frenar la "situación dramática" que vive la región, lo que sumado a los 70 millones de euros destinados ya a la zona este año, elevaría el total a casi 158 millones de euros.
Preguntada sobre la aportación económica al Cuerno de África de países emergentes como China, Brasil y Rusia, o los países ricos del Golfo Pérsico, Georgieva se mostró tajante y lanzó "un mensaje muy claro: la riqueza conlleva responsabilidad".
"Hay que moverse rápidamente", subrayó la comisaria en los alrededores del campamento de Ifo, uno de los tres campos que componen Dadaab, donde están asentados miles de refugiados que no tienen cabida en ellos.
La titular de la cartera europea de Cooperación Internacional afirmó que "la solución es invertir en desarrollo sostenible, porque ésta no va a ser la última sequía que afecte a la zona".
Georgieva alabó la "resistencia increíble" de los somalíes que, caminan durante días o incluso semanas para huir de la complicada situación de su país, pero insistió en que hace falta "un esfuerzo inmenso para ayudarles".
Además, la política búlgara indicó que se está consiguiendo repartir ayuda en Somalia, a pesar de la reciente advertencia del grupo radical islámico somalí Al Shabab, vinculado a la red Al Qaeda, en la que reafirmó su veto al acceso de organizaciones humanitarias de la ONU a los territorios bajo su control.
Georgieva visitó hoy Dagahaley y Ifo, dos de los tres campos que forman el campamento de Dadaab, con capacidad para 90.000 personas, pero que actualmente acoge a unos 400.000 refugiados, cifra que aumenta en unas 1.300 personas diarias que huyen de la sequía y el conflicto en Somalia.
Durante la visita, la comitiva europea conoció también la extensión del campo de Ifo, denominado "Ifo 2", con capacidad para unas 80.000 personas, pero que está cerrado a la espera de que el Gobierno de Kenia autorice su apertura definitiva.
Georgieva viajará mañana a Doloow (sur de Somalia) y, en los días sucesivos, a la localidad keniana de Moyale (norte), en la frontera con Etiopía, para visitar algunas de las zonas más afectadas por la sequía.
El pasado martes, la ONU declaró el estado de hambruna en dos regiones del sur de Somalia -Bakool y Baja Shabelle-, algo inédito en ese país en dos décadas, y pidió 300 millones de dólares (210 millones de euros) a la comunidad internacional para "salvar vidas".
Las Naciones Unidas han calificado la actual sequía que azota al Cuerno de África como la peor en la región en los últimos sesenta años, y aseguran que sus devastadores efectos han puesto en situación crítica a unos 11 millones de habitantes.
No obstante, la ONU no prevé que la hambruna se extienda más allá de Somalia, pese a la situación de grave crisis alimentaria que padecen el sur de Etiopía y el norte de Kenia.