Una joven herida durante la carga policial recibe atención de paramédicos.
EFEMADRID.- La policía española cargó en la noche de este jueves para disolver a manifestantes reunidos en la Puerta del Sol de Madrid, quienes protestaban contra la visita del Papa Benedicto XVI y la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ).
Los manifestantes se habían reunido a última hora de la tarde en ese característico sector de la capital hispana, pero fueron desalojados a golpes de porras por los agentes.
La policía había cerrado la plaza para impedir que se repitieran los enfrentamientos verbales del día anterior entre opositores al Papa y peregrinos católicos.
"Me han golpeado cinco o seis veces, vamos desarmados, sin hacer absolutamente nada", dijo Bruno, un joven de 30 años, quien mostraba sangre en su codo. "Gracias a que me he cubierto la cabeza no la tengo abierta".
La policía cargó tras dar la orden a la gente de dispersarse y cuando parecía que los manifestantes se retiraban.
"Me han empujado y me escondí. La gente salió corriendo y les golpeaban", dijo, por su parte, Inés Monroy Pérez, de 58 años y guardia en un museo.
En el centro se habían reunido unos 150 manifestantes contrarios a la visita del Papa, desde integrantes del movimiento de los "indignados" a asociaciones defensoras del Estado laico.
Un centenar de policías se habían apostado a última hora de la tarde en la entrada de las calles que desembocan en la Puerta del Sol, algunas de las cuales estaban clausuradas con cintas, mientras las estaciones de metro se cerraron.