LONDRES.- El Gobierno británico condenó hoy el "despreciable" ataque cometido por un comando suicida talibán contra el Consejo de ese país en Kabul, en el que al menos ocho personas murieron y varias resultaron heridas.
El Ejecutivo reaccionó mediante un comunicado del secretario de Estado de Exteriores, Alistair Burt, al ataque ocurrido a las 05.39 horas (01.09 GMT) en esa institución, que gestiona las relaciones culturales del Reino Unido en el extranjero.
Según la brigada Criminal de Kabul, un terrorista suicida hizo estallar una carga explosiva en su vehículo, y tras el estallido se produjeron combates entre insurgentes y las fuerzas del orden.
"Condeno este ataque despreciable contra el Consejo Británico en Kabul y mis pensamientos están con aquellos que han fallecido o resultado heridos así como con sus familiares y amigos, incluidos los afganos que trabajaban para proteger ese edificio", afirmó Burt en la nota.
Este responsable señaló que es "triste que de nuevo un ataque dirigido a la comunidad internacional haya matado a afganos".
"Este ataque contra las personas que trabajaban para ayudar a construir un futuro mejor para Afganistán no socavará la resolución del Reino Unido de apoyar a los afganos", aseguró Burt.
El Consejo Británico está emplazado en el barrio de Karte Parwan, no lejos de un recinto de la misión de las Naciones Unidas en Afganistán, el instituto Nadiria y viviendas de políticos como el vicepresidente Mohamed Fahim.
Miembros y vehículos de las tropas internacionales desplegadas en Afganistán se desplazaron al lugar del ataque, pese a que la responsabilidad por la seguridad fue transferida a las fuerzas afganas el pasado mes de julio.
Un portavoz talibán, Zabiulá Muyahid, reivindicó el ataque, y explicó al canal televisivo afgano Tolo que uno de los integrantes del comando hizo estallar un camión a las puertas del centro, lo que permitió la entrada de los demás en un Toyota Corolla.
El ataque de hoy coincide con la celebración del Día de la Independencia de Afganistán, que conmemora la libertad nacional, obtenida de manos del Imperio Británico, en el año 1919.