WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos Barack Obama llamó este miércoles al gobernador republicano del sureño estado de Texas Rick Perry para ofrecerle ayuda en el combate a los incendios que ya se han cobrado cuatro vidas y destruido un millar de viviendas.
Obama ofreció sus condolencias por la muerte de las cuatro personas y toda la asistencia que sea necesaria para controlar el fuego, indicó la Casa Blanca en un comunicado.
El presidente brindó seguridades al gobernador de Texas de que todo pedido adicional de asistencia al gobierno federal será satisfecha, agrega el texto. El servicio forestal de Texas indicó el miércoles que gracias a las temperaturas más frescas y a los menores vientos registrados en la jornada los bomberos pudieron controlar el 30% de los incendios.
"Desde el domingo se han perdido cuatro vidas humanas y los equipos que disponemos sobre el terreno están intentando determinar el número exacto de viviendas destruidas", declaró April Saginor, vocera de ese servicio.
Señaló no obstante que existe seguridad de que más de mil casas se han incendiado.
Saginor informó igualmente que se agregará un nuevo avión a los que ya participan en el combate a los incendios. Los focos ígneos de mayor extensión son unos 30, concentrados en la región oriental del estado.
"En los siete últimos días debimos atender unos 172 focos, que quemaron unas 54.600 hectáreas", dijo Saginor.
Más de 1,4 millones de hectáreas se han incendidado por causa de más de 18.700 incendios desde que comenzó la temporada en diciembre.