LONDRES.- Un civil iraquí que murió mientras estaba detenido por militares británicos en 2003 sufrió un "horroroso episodio de serie violencia gratuita". Así lo indica las conclusiones de una investigación pública sobre el caso divulgadas este jueves en Londres.
Baha Musa, un recepcionista de hotel de 26 años, murió el 15 de septiembre de 2003 tras sufrir 93 heridas, al día siguiente tras haber sido detenido por militares británicos en Basra, al sur de Irak, en septiembre de 2003.
Otros, al menos, nueve presos iraquíes fueron víctimas de malos tratos.
Estos hechos "constituyen un horroroso episodio de seria violencia gratuita contra los civiles que resultó en la muerte de un hombre y heridas a otros" y "representan una muy grave violación de disciplina por parte" de soldados que los custodiaban", declaró el presidente de la comisión, William Gage, al presentar las conclusiones de tres años de investigación.
Gage consideró que supusieron una gran mancha en la reputación de las fuerzas armadas" británicas en Irak.
Pocos días después de la muerte de Musa, las tropas británicas entregaron el cadáver a la familia de Musa, con múltiples contusiones y sin explicaciones.
Siete soldados británicos fueron juzgados por una corte marcial en 2007 en conexión con este caso, y todos ellos fueron absueltos con la excepción de uno, condenado a un año de prisión.
Otro informe encargado por el ministerio de Defensa concluyó en enero de 2008 que el maltrato de civiles en Irak por parte de soldados británicos no había sido "sistemático" y era consecuencia de lagunas en la formación de los militares.