EL CAIRO.- Los abogados de las víctimas en el proceso contra el expresidente egipcio Hosni Mubarak denunciaron que no les dejan acceder a la sala, donde hoy está previsto que se reanude el juicio, porque les piden un permiso especial.
Uno cuarenta abogados de la acusación se han quedado fuera de la sala de la Academia de la Policía de El Cairo, habilitada para este juicio.
La letrada Samira el Hirsh se quejó de que "los abogados de los acusados han entrado todos".
"A nosotros, que defendemos a los mártires, no nos dejan entrar, solo se lo han permitido a los que tienen una autorización especial del Ministerio del Interior", indicó El Hirsh.
La abogada consideró que detrás de esa medida hay instrucciones del Ministerio del Interior, que todavía conserva su lealtad al extitular de este departamento Habib al Adli, que está siendo juzgado junto a Mubarak por la matanza de manifestantes durante la Revolución del 25 de Enero.
El Hirsh subrayó que "desde el punto de vista del procedimiento se trata de una violación del derecho a la defensa".
Tan solo diez abogados de la acusación han logrado acceder a la sala, donde hoy se espera que testifique a puerta cerrada el jefe de la junta militar egipcia que gobierna actualmente el país, mariscal Husein Tantaui.
Los letrados que se han quedado fuera no paraban de discutir y criticar la medida porque, a su juicio, con el carné profesional tienen derecho a asistir a la vista, e incluso algunos mostraban documentos que probaban que son abogados de la acusación.
Entretanto, Mubarak todavía no ha llegado al lugar, donde hay un amplio despliegue de seguridad con soldados, agentes antidisturbios y policías militares.
Mientras, unas veinte personas protestaban para pedir la liberación del preso islamista Omar Abderrahman, detenido en EE.UU. por sus supuestos vínculos con la red terroristas Al Qaeda.
Cuando algunos abogados de las víctimas se unieron a la protesta, los manifestantes cambiaron su reivindicación para solicitar que Tantaui diga la verdad en la audiencia de hoy y para criticar la situación actual de Egipto.
Pese a estos incidentes, reina un ambiente de relativa calma en la Academia de la Policía, adonde han acudido unos diez familiares de las víctimas de la revolución.