Moussa Ibrahim, portavoz de Jaddafi, fue quien informó sobre los arrestos.
Reuters
BANI WALID/SIRTE, Libia.- Fuerzas leales al depuesto líder libio Moammar Jaddafi dijeron hoy que capturaron a 17 mercenarios -algunos británicos y franceses-, en un golpe que supondría un profundo revés para los nuevos gobernantes del país y sus partidarios internacionales.
La afirmación efectuada por el portavoz de Jaddafi, Moussa Ibrahim, no pudo ser verificada pero se produce en momentos en que las nuevas autoridades afrontan reveses en el campo de batalla y la arena política.
Un mes después de que Jaddafi fuera expulsado del poder, sus seguidores han contraatacado asestando golpes a las fuerzas del Consejo Nacional de Transición (CNT) en la población de Bani Walid y desafían los intentos por capturar Sirte, ciudad natal del ex líder.
Su fracaso a la hora de capturar bastiones pro Jaddafi ha llevado a los combatientes del CNT a huir de forma desordenada.
El CNT, que sigue teniendo su sede en la oriental ciudad de Bengasi, aún afronta dudas sobre si puede unir a un país profundamente dividido en líneas tribales y locales. El prometido intento de crear un Gobierno interino más integrador fracasó durante la noche.
"Un grupo que consiste en 17 mercenarios fue capturado en Bani Walid. Son expertos técnicos e incluyen a agentes consultivos", dijo el portavoz Ibrahim a la cadena de televisión siria Arrai, que ha respaldado al derrocado líder.
"La mayoría de ellos son franceses, uno de ellos es de un país de Asia que no ha sido identificado, dos ingleses y un qatarí", agregó.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia dijo que no tenía información sobre la noticia. En tanto, autoridades británicas dijeron que tenía constancia de las informaciones de los medios sobre la captura de mercenarios pero no podía demostrar su veracidad.
Responsables qataríes no estuvieron disponibles inmediatamente para hacer comentarios.
La OTAN, que está llevando a cabo ataques aéreos contra posiciones de leales a Jaddafi, dice que no tiene tropas sobre el terreno en Libia. No obstante, las naciones occidentales han enviado fuerzas especiales en el pasado y la prensa ha informado que firmas de seguridad privada han ayudado a fuerzas anti Jaddafi en entrenamiento, orientación y liderazgo.
Los intentos del Gobierno interino por capturar Bani Walid, 150 kilómetros al sureste de Trípoli, se han convertido en una debacle, ya que las fuerzas del gobierno provisional emergen repetidamente para atacar la ciudad para ser expulsados.
El lunes, las fuerzas del CNT no pudieron acercarse a la puerta norte para atacar la población debido al intenso fuego de los leales a Jaddafi.
Los combatientes dijeron el domingo que habían planeado encabezar el ataque con tanques y camionetas con armas antiaéreas y lanzagranadas, pero los soldados de a pie entraron primero y fueron expulsados.
"Hay falta de organización hasta la fecha. Los hombres de infantería corren en todas direcciones", dijo Zakaria Tuham, un destacado combatiente en la unidad con sede en Trípoli.
Algunos combatientes comentaron las tensiones entre las unidades de Bani Walid con las de otras partes del país.
Se han reportado casos de soldados que desobedecen órdenes abiertamente. En un incidente, un agente de Bani Walid fue abucheado por tropas de Trípoli cuando trató de intentar que éstas dejaran de disparar al aire para celebrar que habían capturado un mortero a las fuerzas de Jaddafi.
Las fuerzas del CNT y aviones de la OTAN también atacaron Sirte. Los combatientes lanzaron cohetes desde la entrada sur de la ciudad e intercambiaron disparos con leales a Jaddafi, atrincherados en un centro de conferencias.
En Bengasi, el primer ministro interino Mahmoud Jibril no pudo nombrar un nuevo gabinete cuando sus propuesta no recibieron el respaldo necesario.
Tampoco hubo acuerdo sobre la necesidad de formar un Gobierno de transición antes de declarar a Libia "liberada", algo que para el CNT sólo podrá ocurrir cuando se derrote a las fuerzas leales a Jaddafi en todo el país.