WASHINGTON.- El principal sospechoso de los atentados en Yemen contra el destructor estadounidense USS Cole en 2000 y el petrolero francés Limburg en 2002 será juzgado en Guantánamo, en lo que será el primer juicio de este tipo desde que Barack Obama asumió la presidencia.
Abd al Rahim al Nachiri, un saudí de 46 años, será juzgado por ambos ataques en un tribunal militar de excepción en Guantánamo, anunció el miércoles el Pentágono. De ser hallado culpable, podría ser condenado a pena de muerte.
Se trata del primer preso que se trasladará a Cuba desde principios de marzo, cuando Obama decidió volver a enviar a acusados ante los tribunales militares de excepción de Guantánamo y reiniciar los procesos en la base estadounidense en la isla que él mismo había congelado tras su llegada al poder, a principios de 2009.
Desde entonces, el Mandatario y el Congreso han reformado los controvertidos tribunales para privilegiar claramente el derecho a la defensa.
El Departamento de Justicia espera llevar a cabo juicios en Guantánamo para 33 de los 171 reclusos que se encuentran actualmente allí encarcelados, entre ellos los cinco hombres sospechosos de organizar los ataques del 11 de septiembre de 2001.
Al Nachiri es sospechoso de haber planificado y participado en la preparación del atentado cometido el 12 de octubre de 2000 contra el barco militar estadounidense USS Cole mientras estaba fondeado en el puerto de Adén, en Yemen.
El atentado, que fue reivindicado por Al Qaeda, mató a 17 marineros e hirió a 40 más.
Por otra parte, Al Nachiri está acusado por la justicia militar estadounidense de haber participado en la preparación del atentado contra el MV Limburg, un petrolero francés sobre el que se lanzó una embarcación llena de explosivos en el golfo de Adén el 6 de octubre de 2002, en un ataque en el que falleció un marinero búlgaro.
El saudí será juzgado igualmente por una tentativa de atentado contra otra embarcación norteamericana, el USS Sullivans, al que atacaron mientras repostaba carburante también en el puerto de Adén, el 3 de enero de 2000.
Arrestado a fines de 2002, Al Nachiri desapareció durante años en cárceles secretas de la CIA antes de reaparecer en Guantánamo en septiembre de 2006. El acusado pidió ese año a la justicia polaca realizar una investigación sobre las torturas que, según él, sufrió en una cárcel secreta de la CIA en Polonia.
Según los documentos oficiales publicados en agosto de 2009, el presunto terrorista sufrió decenas de sesiones de simulacros de ahogamiento, una técnica de interrogatorio considerada como tortura. También fue amenazado con un revólver en la cabeza y con una taladradora eléctrica.