MONTEVIDEO.- El ministro de Defensa Nacional de Uruguay, Eleuterio Fernández Huidobro, descartó cualquier posible acuerdo extra judicial con un joven haitiano víctima de abusos por parte de militares uruguayos integrantes de la Misión para la Estabilización de Haití de Naciones Unidas (Minustah).
"Es imposible (cualquier acuerdo), si la Justicia define que hay un delito, el delincuente va preso. No hay arreglo", afirmó Huidobro en declaraciones que publica hoy la prensa local.
El ministro de Defensa Nacional agregó que la víctima si lo desea puede "venir a Uruguay y reclamar (una eventual compensación económica) frente a los juzgados civiles uruguayos".
Más adelante, en declaraciones ofrecidas a la televisión, Huidobro destacó que la víctima está en paradero desconocido y señaló que los medios haitianos informan que sacó un pasaporte junto a su familia, lo que a su juicio indica "que estén buscando un juicio en alguna esfera internacional".
El ministro aprovechó, además, para denunciar la "campaña de desprestigio" contra Uruguay y contra las misiones de paz de Naciones Unidas que se está produciendo a raíz de este caso.
"Desprestigiar (el trabajo de la ONU en Haití) porque una pequeña minoría que cometió un delito es una campaña inadmisible", dijo el ex guerrillero tupamaro.
Huidobro comparecerá en esta jornada frente a una comisión de Defensa Nacional del Parlamento para dar detalles sobre el caso.
Cinco marinos uruguayos integrantes de la Minustah fueron procesados y encarcelados el pasado mes por la justicia militar acusados de los delitos de desobediencia, omisiones al servicio y desafuero a la vigilancia militar.
Además, son investigados en la Justicia civil por la presunta violación del joven haitiano.
El abogado defensor de cuatro de los cinco acusados, Gastón Chávez, declaró que en su primera comparecencia ante la Justicia civil los marinos dijeron al juez que lo sucedido fue "una broma" y consideró que el caso debería archivarse porque no sucedió "nada que comprometiera la integridad física o sexual" del joven haitiano.
El juez del caso solicitó que a través de la ONU se localice a la víctima para tomarle declaración en una vídeo conferencia.
Según fuentes judiciales, sin la declaración de la víctima es probable que el caso se archive por falta de pruebas.
Los abusos de los que se acusa a los marinos sucedieron en la localidad de Port Salut (sur de Haití) y fueron difundidos por internet en un vídeo grabado con teléfono celular.
Las imágenes muestran a cuatro de los cinco involucrados (el quinto es que las tomó) burlándose de un joven al que mantienen tumbado boca abajo, mientras uno de ellos se coloca detrás de él con el torso desnudo.
Un informe de la ONG Red Nacional de Defensa de Derechos Humanos (RNDDH) de Haití denunció que la víctima fue sodomizada dos veces.
La agresión motivó la condena del presidente haitiano, Michel Martelly, y las disculpas públicas de su homólogo uruguayo, José Mujica.