RIO DE JANEIRO.- Al menos tres personas murieron y 17 resultaron heridas, tres de ellas de gravedad, en una fuerte explosión ocurrida este jueves en un restaurante del centro de Rio de Janeiro, informó la secretaría de Salud de la ciudad.
El balance anterior realizado por el alcalde de Rio, Eduardo Paes, daba cuenta de tres muertos y 13 heridos. "La mayoría de los heridos son transeúntes. No fue una tragedia mayor porque las tiendas recién empezaban a abrir" a la hora de la explosión, indicó Paes en el lugar de la explosión.
"Una acumulación de gas se produjo en el restaurante el miércoles (día feriado, cuando el lugar estuvo cerrado) a raíz de un escape de gas. Se trataba de gas en garrafas. Cuando el cocinero llegó y encendió la luz, se produjo la detonación", indicó el portavoz de Seguridad Pública del estado de Rio, el coronel Lima Castro.
La deflagración fue tan violenta que "el cuerpo del cocinero, identificado por otro empleado del restaurante, fue proyectado 50 metros y quedó en el medio de la plaza" Tiradentes, frente al restaurante, subrayó. "Los otros dos muertos eran personas que caminaban por el lugar", añadió.
La explosión se produjo en un restaurante ubicado en un edificio de 11 pisos en la plaza Tiradentes, una de las más animadas del centro de Rio y antiguamente conocida como centro de prostitución.
La plaza del siglo XVIII había sido completamente renovada el año pasado. La planta baja y el primer piso del edificio quedaron completamente destruidos y la plaza quedó cubierta de escombros, vidrio y manchas de sangre.
El alcalde de Rio dijo que la Defensa Civil "pasa un peine fino al edificio, que fue completamente evacuado, para evaluar los riesgos de derrumbe".
Jorge de Assis Rodrigues, de 37 años, testigo del accidente relató que "fue aterrador. Me salvé gracias a un cafecito de 50 centavos de dólar", dijo a periodistas, al explicar que decidió parar a tomar un café antes de pasar por la puerta del restaurante.
"Vi el cuerpo de un hombre caer en el suelo, muerto (...) Sentí que el suelo temblaba. Parecía una escena de guerra", añadió.
Tras la explosión, decenas de turistas huyeron corriendo del hotel Ibis-Formule 1 contiguo al restaurante, que fue temporalmente evacuado.