MOSCÚ.- La investigación sobre las circunstancias del asesinato en 1918 de la familia del último zar ruso, Nicolás II, no encontró ninguna prueba documental de que el fusilamiento fuera ordenado por Lenin y por algún alto cargo del gobierno bolchevique.
"No hay ni un sólo documento que confirme que Lenin o representantes del Kremlin ordenaran el fusilamiento de la familia real. Si hubo órdenes verbales, no están registradas en ningún lugar. El fusilamiento fue ordenado por el Soviet regional de los Urales", dijo Vladímir Soloviov, investigador criminólogo del Comité de Instrucción (CI) de Rusia.
El representante de la Casa Real de Romanóv, Alexandr Zakátov, subrayó que existen indicios que apuntan a la posibilidad de que Lenin y otros altos cargos de la Revolución rusa conocían los hechos.
"Nunca hemos dicho que Lenin diera esa orden. No existen documentos oficiales al respecto, pero esto no excluye que los dirigentes soviéticos hubieran dado la orden, de lo cual existen indicios", dijo Zakátov, citado por la agencia "Interfax".
Nicolás II, su esposa y sus cinco hijos fueron ejecutados en un sótano de la casa Ipátiev, en la ciudad de Yekaterimburgo (Urales), el 17 de julio de 1918, y sus cuerpos destruidos y enterrados en un bosque.
Los restos atribuidos al zar, su esposa y tres hijos fueron hallados en 1979 y, tras ser identificados, sepultados en San Petersburgo en 1998, en presencia del entonces presidente ruso, Borís Yeltsin, y representantes de casas reales.
En agosto de 2009 se hallaron los restos del zarévich Alexéi y la gran princesa María.