El nuevo heredero, el príncipe Nayef bin Abdul Aziz al-Saud.
AFP
RIAD.- El rey de Arabia Saudita, Abdalá bin Abdulaziz, ordenó hoy la designación del príncipe Nayef como heredero del trono saudí, tras la muerte del príncipe Sultán, ocurrida el sábado.
Así lo informó la agencia de noticias oficial SPA.
El príncipe Nayeb bin Abdulaziz, que también fue nombrado vicepresidente del Consejo de Ministros, seguirá ocupando su cargo actual de ministro del Interior, según el comunicado.
La nota no dio más detalles sobre quién ocupará el cargo de ministro de Defensa, ejercido por el príncipe Sultán hasta su muerte.
El heredero del rey Abdalá fue nombrado tras una reunión del consejo encargado de los asuntos de la sucesión monárquica, que se fundó en 2006 y que componen 35 miembros de la Familia Real saudí.
El 22 de octubre, el entonces príncipe heredero saudí, Sultán bin Abdulaziz, murió en un hospital de Nueva York a los 83 años de edad, debido a un cáncer de colon, y fue sepultado tres días más tarde en Riad en un funeral al que asistieron dignatarios de todo el mundo.
El nuevo sucesor al trono es el príncipe Nayef, el actual titular de Interior que, a sus 78 años, cuenta con experiencia en la administración de los asuntos del Estado, pues ya se encargó de suplir la ausencia del rey entre finales de 2010 e inicios de 2011.
Lucha contra el terrorismo
El príncipe ganó prestigio internacional por su gestión al frente del Ministerio del Interior en la lucha contra el terrorismo tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.
Además, son conocidas sus ideas conservadoras debido a las opiniones que ha expresado públicamente y que han estado caracterizadas por la severidad y la restricción de las libertades al rechazar, por ejemplo, que las mujeres saudíes puedan conducir.
Arabia Saudita experimenta una tibia apertura política y social expresada en la reciente elección de concejos municipales, la segunda que se lleva a cabo en toda la historia del país, y el anuncio hecho por el actual monarca de conceder más derechos políticos a las mujeres.
El reino de Arabia Saudita ha sostenido desde su origen una visión rígida del Islam bajo la doctrina wahabí. No obstante, el enorme crecimiento económico generado por el petróleo y la reciente primavera árabe han elevado el descontento sobre las restricciones sostenidas por la dinastía.