SIDNEY.- Los huesos encontrados en 2008 y que las autoridades australianas confirmaron en septiembre como los restos del bandolero Ned Kelly, también conocido como el Robin Hood australiano, serán enterrados junto a sus familiares tras ser ejecutado hace 131 años, informan hoy los medios locales.
El fiscal general del estado de Victoria, Robert Clack, decidió devolver los restos mortales hallados a los descendientes de Kelly para que fueran sepultados en el cementerio donde descansa el resto de su familia, indicó Anthony Griffiths, un nieto de la hermana del bandolero australiano.
"Nuestra familia, como cualquier otra, quiere enterrar a sus miembros. Nuestro objetivo es darle un entierro digno", indicó.
Considerado por algunos como un asesino a sangre fría, Ned Kelly también fue visto como un héroe popular y símbolo del desafío irlandés-australiano a las autoridades británicas en su lucha contra los policías corruptos y los barones codiciosos de la tierra.
En 1880 Kelly fue condenado a la horca por varios delitos, como el asesinato de tres policías y múltiples robos y asaltos, pero su cuerpo desapareció después de que fue arrojado a una fosa común.
"Así es la vida"
En septiembre se confirmó que los huesos, a excepción de la calavera, hallados en 2008 en una fosa común en la penitenciaría de Pentridge, en la ciudad de Melbourne, pertenecían a Ned Kelly.
El supuesto cráneo del bandolero, cuyas últimas palabras fueron "así es la "vida, fue robado en 1978 cuando era exhibido en una urna de cristal en la prisión de Melbourne.
Las hazañas de Kelly y su banda han sido objeto de numerosas películas y series de televisión. El vocalista de la banda británica The Rolling Stone, Mick Jagger, interpretó el papel principal en la película de 1970 "Ned Kelly", mientras que Heath Ledger interpretó al bandido en una nueva versión de 2003.
Kelly será enterrado en un pequeño cementerio cerca de la localidad de Glenrowan, lugar de su ejecución, donde descansa su madre Ellen, varios de sus hermanos y otros parientes.